El estrés es la principal causa de desequilibrio, crisis y enfermedad en la actualidad.

 

Nuestro día a día se configura a partir de exigencias externas y en general relegamos la demanda interna a planos de poca importancia. Esta actitud también genera tensión y estrés.

 

En momentos de crisis las personas confrontan su relación con aquello que no logran explicar.

 

Las crisis son una oportunidad de cambio y ofrecen la posibilidad de encontrar sentido a la vida y de establecer contacto de forma natural con el campo de lo transpersonal.

 

La terapia Transpersonal toma como base la psicología tradicional estudiando y tomando para si las técnicas humanistas. Como todas las terapias psicológicas tiene la función de hacer consiente lo inconsciente. La terapia Transpersonal apoya al paciente en su proceso de encontrar el “para que” de cada situación. Le permite asumir la vida desde una perspectiva sana, responsable y activa.

 

El soporte de la terapia Transpersonal se encuentra  en las filosofías orientales; ellas promueven el desarrollo interior, la expansión de la conciencia, la responsabilidad y compromiso personal con uno mismo. Son una fuente de bienestar, paz y felicidad.

 

El objetivo de esta terapia es apoyar al paciente en el desarrollo de una personalidad segura, equilibrada e independiente en un tiempo relativamente breve. Para lograrlo proporciona herramientas terapéuticas, estudio y acompañamiento.

 

Este tipo de terapia es adecuada para personas en procesos de cambio y crecimiento interior. Frente a las viejas estructuras de pensamiento aprendidas, la terapia Transpersonal ofrece las herramientas necesarias para desarrollar naturalmente nuevos sistemas de creencias.

 

El proceso de autoconocimiento es un camino dinámico y permanente, un impulso de vida y una necesidad de comunicación con el ser interior.

 

¿En que momento es adecuada esta terapia?

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• Cuando surge la intensión de cambiar el rumbo de vida y no se sabe como hacerlo.

• En momentos de crisis, cuando una persona se siente perdida.

• Depresión. Ansiedad. Baja autoestima.

• Separaciones o duelos.

• Necesidad de acompañamiento en enfermedades, siendo el enfermo o el cuidador.

• Interés en expansión de la conciencia y espiritualidad.

• Personas que desean experimentar la liberación del perdón.

 

Algunas de las herramientas de trabajo en la terapia transpersonal:

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• PNL (programación neurolingüística) 

• Procesos de regresiones sin hipnosis, para resolver situaciones traumáticas que no permiten seguir adelante, que generan miedo constante, incluso pánico y consumen una gran cantidad de energía vital. Miedo de orígen desconocido. Con antelación se prepara energética y emocionalmente al paciente para este proceso y se aplica sólo si se considera necesario para resolver la crisis.

• Técnicas de relajación y respiración consciente.

• Introducción a la meditación con técnicas básicas y sencillas.

• Flores de Bach. La terapia floral nos sirve de apoyo, ayudando a equilibrar a nivel emocional y mental para resolver con claridad las situaciones cotidianas. Para dar el tratamiento adecuado es preciso tener conocimiento real del problema, para determinar asertivamente que esencias son las mas adecuadas.